La libertad no es negociable: Irán en disturbios

Irán continúa envuelto en un gran clima de conflicto a raíz de la muerte de Mahsa Amini, mujer que fue detenida por la policía de la moral al no usar correctamente su hiyab. Desde que se iniciaron los disturbios, las protestas organizadas han ido en incremento.

Sin embargo, las autoridades del país aseguraron que “tomarán acciones contra los famosos que soplaron las brasas” de las manifestaciones. Tal sentencia va dirigida hacia todas aquellas personalidades del mundo oriental que apoyaron los hechos para así buscar la justicia.

Entre ellos están actores, deportistas, activistas, cineastas e influencers. Debido a sus actos, recibieron advertencias casi dos semanas después.

Por su parte, el gremio periodístico está sufriendo las más grandes consecuencias debido a que han dado cobertura a la ola de protestas. Y la han ofrecido a pesar de la fuerte censura que hay en los medios de comunicación nacionales. Para lograr mayor difusión, recurrieron a diferentes plataformas digitales y compartieron los reportajes en sus perfiles de redes sociales.

A raíz de ello, las fuerzas de seguridad iraníes han arrestado a la periodista Elahe Mohammadi, quien había cubierto el funeral de Amini, según la información revelada por su abogada.

La policía también detuvo a la periodista Nilufar Hamedi, del diario reformista Shargh. Nilufar acudió al hospital en el que estuvo ingresada en coma Amini, y ayudó a que la prensa internacional se hiciera eco de la noticia.

A raíz de todos estos acontecimientos, el ayatolá Jamenei acusó a Estados Unidos e Israel, enemigos geopolíticos de Irán, de orquestar los disturbios que se acrecientan en el territorio.

La universidad se suma a la resistencia

Si bien no existen movimientos estudiantiles desde la Revolución Islámica, y considerando el difícil acceso a internet que hay en todo el país, cada día aparecen más fotos y vídeos de protestas en distintas partes de Irán. Ahora también en las universidades.

El martes 4 de octubre, en la Universidad Ferdowsi de Mashhad —segunda ciudad más grande del país—, los estudiantes exigieron la liberación de todos sus compañeros detenidos, especialmente los pertenecientes a la Universidad Sharif, de Teherán.

Ellos fueron detenidos dos días antes, tras organizar una concentración pacífica en el campus. Sin embargo, la policía y las milicias rodearon el recinto mientras los estudiantes estaban adentro, y dispararon contra algunos de ellos con escopetas de perdigones. La represión se extendió hasta varios profesores, quienes fueron amenazados y golpeados por las fuerzas de seguridad.

Por otra parte, las estudiantes de varias escuelas de Irán han estado agitando sus hiyab al aire y cantando consignas contra las autoridades del país, en una muestra de apoyo sin precedentes a las protestas.

Tipos de velo impuestos por el régimen

Desde que suscitó la Revolución Islámica, las mujeres se han visto obligadas a utilizar esta vestimenta impuesta por las autoridades ultraconservadoras.

Entre las más comunes está el hiyab, que es un tipo de velo más usado por las mujeres islámicas en Occidente, que cubre la cabeza y el cuello pero deja el rostro despejado. Además es el que más variedad de estilos y colores tiene.

En segundo lugar está la shayla, un velo que permite a las mujeres llevar la cabeza descubierta. En esta ocasión consiste en una bufanda rectangular y larga, que se envuelve alrededor de la cabeza y el cuello, para así ser sujetada con alfileres a la altura de los hombros.
Es más utilizada en la región del Golfo. Este tipo de velos se le han visto frecuentemente a la activista Malala Yousafzai, o a la primera alcaldesa de Afganistán, Zarifa Ghafari.

También, con el rostro descubierto, existen los velos conocidos como khimar y al-amira. Con estos se cubre la cabeza, el pelo, el cuello y los hombros. Sin embargo, el khimar es un velo largo con forma de capa que cuelga hasta la cintura.

Por su parte, la al-amira es un velo compuesto por un gorro y una bufanda en forma de tubo. En recientes días, se popularizó la imagen de la corresponsal estadounidense Clarissa Ward utilizando este tipo de velo en las redes sociales.

Entre otros de uso más conservador, está aquel que deja semidescubierto el rostro, que es el niqab. Solo deja al descubierto el área de los ojos. Para las mujeres iraníes que salen de sus hogares, está el chador, un manto que las cubre de cuerpo entero.

Y por último está el burka, que se trata de una prenda impuesta por el régimen talibán. Este es el velo que más cubre a las mujeres musulmanas. Está compuesto de una sola pieza que va de la cabeza hasta los pies, dejando una rejilla a la altura de los ojos.